La reforma del Código Penal del año 2010 introdujo la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Es decir, si se comete un delito dentro de sociedad se le puede exigir responsabilidad penal al consejo de administración o a los administradores.

Por este motivo se está haciendo imprescindible para las empresas la implantación de la figura del compliance officer oficial o auditor de cumplimiento normativo en castellano.

Cuando nos referimos a cumplimiento normativo nos referimos a todo el “ecosistema legal” que envuelve/alrededor de una empresa dependiendo del tipo de operativa que tenga: fiscal, laboral, medioambiental, sanitaria, protección de datos, seguridad…

¿Qué es un compliace officer?

El Compliace Officer es la persona que se encarga de supervisar y gestionar las cuestiones relativas al cumplimiento normativo: poner en conocimiento de los órganos de administración si se están produciendo incumplimientos, si existen posibles riesgos de incumplimiento… Todo ello con el objetivo de evitar la responsabilidad penal de la propia persona jurídica.

El compliance officer debe ser absolutamente independiente, con acceso a la dirección, pero con una absoluta autonomía para no verse condicionado o coaccionado.

Entre sus funciones destacan:

  • Diseñar y adaptar a cada momento los controles normativos necesarios para cumplir la legislación vigente.
  • Controlar el funcionamiento de los sistemas diseñados y, participar en cualquier tipo de investigación.
  • Acceder a toda la información de la empresa y sus sistemas para detectar y corregir en su caso cualquier riesgo.
  • Es el responsable de comunicar el programa de compliance a los empleados.
  • Coordinar el programa de denuncias interno.

¿Es obligatorio tener un compliance officer?

De momento no existe normativa que exija la figura de compliance officer. Pero, sin ser obligatorio es cada vez más habitual para las empresas que contratan con las Administraciones Públicas tener un sistema de compliance, ya que en muchas ocasiones es un requisito para la contratación.

Por otro lado, aunque no sea obligatorio es muy recomendable contar con un auditor de cumplimiento (compliance officer) ya sea interno o externo, para evitar la comisión de delitos por los que pueden responder directamente las empresas (estafas, corrupción, contra los derechos de los trabajadores, medio ambiente, etc.).

¿Qué empresas deben contar con un auditor de cumplimiento (compliance officer)?

Cualquier empresa con independencia de su tamaño está inmersa en un “ecosistema legal” de normativa que debe cumplir. Al afectar la responsabilidad penal a cualquier tipo de persona jurídica, es deseable contar con la figura de un auditor de cumplimiento (compliance officer) sea cual sea la tipología, tamaño y sector de la empresa.

Fotografía de Nick Youngson en thebludiamondgallery.com