La sentencia del T.S. de fecha 3 de enero de 2.014 analiza la colisión del derecho a la información y a la libertad de expresión con el del honor en los siguientes términos:

«Cierto es que mediante la entrevista se intenta poner en conocimiento de la opinión pública determinados hechos relacionados con la salud de la entrevistada y la actuación del médico, pero también lo es que se emiten opiniones y se efectúan comentarios o juicios de valor de contenido crítico sobre la persona y actuación del demandante que afectan de forma evidente a su reputación o prestigio profesional pues este es el efecto propio de la emisión de juicios de valor y de imputación de hechos mas allá de lo que pretendía la entrevista a tenor de la situación personal de la sra. Camila y de la preocupación de sus familiares por la obsesión por perder peso. Lo que  realmente se hizo fue poner en duda determinadas practicas médicas del demandante con sus pacientes, a quien se identifica, mediante graves acusaciones que han afectado a su ética y prestigio profesional ganado en el ámbito en el que desarrolla su actividad (sector de la medicina), y tales manifestaciones, que llegaron incluso a decir que llevaron a la paciente al borde de la muerte, son inciertas, se han hecho sin una mínima investigación y sin las diligencias mínimas exigidas y, en definitiva, sin evaluar el daño que tal actuación ha conllevado pues, por su propio contenido, han causado un indudable descrédito en la consideración personal y profesional del demandante. En definitiva, la ponderación de las expresiones utilizadas nos lleva a considerar de mayor relevancia en este caso el derecho al honor sobre la libertad de expresión. Las expresiones empleadas, agravian innecesariamente la dignidad o el prestigio del demandante y atentan contra su fama, como un aspecto o manifestación del derecho al honor constitucionalmente protegido No se advierte, pues, que la sentencia recurrida, cuya valoración es totalmente acorde con todo lo aquí razonado, incurra en la infracción que se le reprocha.»